lunes, 15 de julio de 2013

Todo a una carta.

Hola, amor.
Aquí me ves, hecha pedazos por ti, por mí, por nosotros. Cuando empiezo a sentir que todo cae y no podemos remediarlo... ¿Yo qué sabía que llegaría a quererte así? De tal manera que estaría dispuesta a darlo todo, absolutamente todo, por ti, por esto, por verte sonreír día a día y que yo sea el motivo. Daría lo que fuera necesario, pero ahora y siempre, para que esto saliera bien, para cumplir todo lo que un día dijimos.
El fallo ha sido mío. He fallado en quererte así y en tener miedo en el "para siempre". También he fallado en eso de acostumbrarme a ti, a tu risa, a tu olor, a tus besos y momentos de risas temporales; me acostumbré a tu forma de mirar, a tus brazos, a tus mimos, a cuando te reías cuando fallaba en algo, a tus "te quiero" espontáneos, a tu forma de tratarme.
Lo siento por ser así de celosa, esos celos que me comen por dentro, por mi genio, ese que tanto me molesta tener, lo siento por ser así y, es más... Lo siento por quererte así.
Y a día de hoy, solo queda poner las cartas sobre la mesa y decidir, decidir si seguir con esto por y para siempre o que el "adiós" se nos adelante. Lo único que espero es que esto sea un simple bache malo, que pase y que estemos como siempre, porque te quiero y estoy dispuesta a demostrarlo millones y millones de veces. No quiero perderte jamás.