lunes, 15 de julio de 2013

Todo a una carta.

Hola, amor.
Aquí me ves, hecha pedazos por ti, por mí, por nosotros. Cuando empiezo a sentir que todo cae y no podemos remediarlo... ¿Yo qué sabía que llegaría a quererte así? De tal manera que estaría dispuesta a darlo todo, absolutamente todo, por ti, por esto, por verte sonreír día a día y que yo sea el motivo. Daría lo que fuera necesario, pero ahora y siempre, para que esto saliera bien, para cumplir todo lo que un día dijimos.
El fallo ha sido mío. He fallado en quererte así y en tener miedo en el "para siempre". También he fallado en eso de acostumbrarme a ti, a tu risa, a tu olor, a tus besos y momentos de risas temporales; me acostumbré a tu forma de mirar, a tus brazos, a tus mimos, a cuando te reías cuando fallaba en algo, a tus "te quiero" espontáneos, a tu forma de tratarme.
Lo siento por ser así de celosa, esos celos que me comen por dentro, por mi genio, ese que tanto me molesta tener, lo siento por ser así y, es más... Lo siento por quererte así.
Y a día de hoy, solo queda poner las cartas sobre la mesa y decidir, decidir si seguir con esto por y para siempre o que el "adiós" se nos adelante. Lo único que espero es que esto sea un simple bache malo, que pase y que estemos como siempre, porque te quiero y estoy dispuesta a demostrarlo millones y millones de veces. No quiero perderte jamás.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Cansada.

No voy a decir que estoy harta porque lo que realmente me ocurre es que estoy cansada de que en esta sociedad se juzge por un simple estilo de vestir, por un estilo de música o por una forma de ser. Cansada de que se encasille a todo el mundo porque ni todos los tíos son iguales ni todas las tías somos como se suele pintar. Un estilo de música, ¿qué es eso? Eso va con nuestros gustos y es totalmente respetable, no creo que lo más oportuno sea descalificar a una persona por lo que escuche o insultar a un cantante, hay mejores porque siempre habrá algo mejor pero también los hay peores y simplemente esa gente se centra en la misma persona. Cansada de que se juzge por una simple apariencia ya que si una persona no va sonriente ya  es o una amargada o muy seria u otros adjetivos, se debe de entender de que NO podemos ir todo el día con la sonrisa puesta, flojeamos durante el día y no tenemos porqué sonreír si no nos apetece. Cansada de que las opiniones que no van acordes con otras sean tratadas como una basura, ¿basura porqué? Nuestra opinión es NUESTRA y nada ni nadie debe hacernos callar, no hay que dar explicaciones porque hay gente que realmente ni las merece y aquellas que las merezcan... Se harán notar. Me canso de que en esta sociedad siempre haya el mismo prototipo de personas. Me canso de las tonterías del día a día. 
Me canso de los falsos "para siempre" que nunca se cumplen y que si no los prometes parece que... No sientes nada, y aseguro que siento, soy persona, sufro, lloro y río, pero yo no soy fan de los "para siempre" es más... Me dan miedo, y sí, soy una persona fría a simple vista y por ese hecho he recibido todo tipo de comentarios que ¿sabes qué? Doy las gracias, me han hecho ser como soy a día de hoy; pero la gente que me conoce de verdad sabe que no es así, que soy una sobona. Si no confiamos en alguien así de repente ya no somos como el resto y reconozco que a mí me cuesta hacerlo. Y no estoy de acuerdo con la mitad de cosas que se han establecido como "normales" en esta s(o/u)ciedad pero aquí me ves, salgo como puedo aunque cada día me indigne un poco más. A veces creo mundos paralelos y me gustaría perderme entre mis ideas y no volver, allí me siento segura y tranquila pero, visto lo visto, eso es imposible. 
No perdamos la esperanza, dicen que eso es lo último que se tiene que perder, ojalá las cosas den un gran cambio, yo sería fan de ese cambio, además... Lo exijo, seguro que todo sería mejor.

Un boomerang.

No me esperaba eso de ti, quedaban promesas e historias por cumplir. ¿Sabes? Nos lo dimos todo, hasta lo que no teníamos. A día de hoy afirmo que me cuesta olvidarlo todo, fue demasiado tiempo y, lo creas o no, yo recuerdo todo, cada día, aunque me haga la fuerte, recuerdo nuestras ñoñadas, nuestros piques, nuestros momentos, nuestros besos, nuestras conversaciones, todas y cada una de ellas. Pero es verdad eso de que todo cambia, que el café se enfría y el humo se disipa, que el agua en estado líquido se puede condensar, pero te aseguro que sigue siendo agua. Esto era un continuo boomerang, yo era la que lo recibía, te ibas y volvías continuamente, pero te aseguro que ese momento en el que volvías me hacías la persona más feliz y no lo negaré jamás. Acepté quererte con tus pros y tus contras, acepté todo lo que algunos rechazaron en su día de ti pero decidí quererme y a mí, el boomerang, ya se me escapaba de las manos. La verdad es que te quería pero también me quería y me alejé por ello; era una prisión en la que ni yo era yo ni tú eras tú. 

jueves, 14 de febrero de 2013

Una última despedida.

Tuve que ver el peor lado de esta jodida vida. Le dije adiós y en aquel último y frío beso decidió quedarse a mi lado y pensé en los planes que nos quedaba por cumplir, un verano juntos como me dijo en sus últimos días, las historias que me quedaban por oír... Estaba tan guapo, parecía que estaba dormido (ojalá) y mi único deseo era que esa dichosa sábana que era la única que lo podía tocar se moviera por el hecho de que respiraba pero, como él me enseñó "quien espera, se desespera" Yo sólo pasaba allí los minutos y lloraba, de impotencia, de tristeza, de ver que no se lo podía haber demostrado todo. Y entre sollozos soltar ese "te quiero, no te voy a olvidar" es muy duro mientras que ves la alegría de otros en su rostro en ese momento. 
Fue, es y será alguien muy importante para mí aunque a penas se lo dijera, un claro ejemplo a seguir, luchando durante seis años y ahora, en el único momento en el que él confiaba salir, se fue... Nos dijo adiós, a todos, se marchó y dejó atrás a este dichoso y asqueroso mundo, dejó en tierra a corazones que todavía se sienten apenados por su marcha.En el último momento de todos, cuando fue la última vez que te íbamos a ver, me retiré del resto de la gente y en un rincón, entre pequeñas lágrimas sentía que estaba a mi lado, me empujaba a salir a delante, no pensaba que estaba sola y esa rosa blanca... La que le acompañó hasta el último momento la tenía en mi mano, y con diferencia, me sentía acompañada, no tenía necesidad de estar con mil personas, todas ellas no igualarían los momentos que ambos pasábamos. Eran esas palabras, esa voz firme, esas costumbres, esos gestos los que echo de menos, todos los días y en cualquier momentos, pequeños detalles que marcan la diferencia.  
Prometo no olvidarle jamás, llevarle cada día en mi corazón, pase lo que pase; pienso cumplir lo prometido, que no crea que esta enana que no comía va a tirar a la basura esas promesas, saldré adelante por el mero hecho de que él siempre ha confiado en mí y prometo cuidar de los demás, no como él porque lo hacía de una manera preciosa y perfecta, pero lo haré y sacar todos esos estudios de los que me decía que eran complicados pero que no hay sueño grande sino soñador pequeño, y cuando haya terminado de cumplir mi promesa, hablaremos, no quiero que en mi vida esa sea la única promesa que le pueda cumplir porque es mucho y que se entere el mundo entero. Me queda el recuerdo, los momentos vividos y sé que nada le igualará. Podría escribir durante horas pero poco a poco, que las prisas nunca son buenas. Te quiero. 

miércoles, 9 de enero de 2013

Mentira.

Vivir y dejar vivir. Comer y dejar comer. Hacer y dejar hacer. Hablar y dejar que hablen. Demostrar y que te demuestren. Mentira. Siempre hay alguien que lo da todo a cambio de nada, que perdona lo imperdonable, que sigue ahí a pesar de todo lo que haya pasado y no se valora pero esa persona piensa "¿qué más da? Una vez más..." Pero no, equivocados todos los que piensen así. Soy de las primeras que dicen "No me sé valorar, ya vendrá alguien que lo sepa hacer" Y mientras espero a ese alguien  recibo golpes y dañada por todos sitios doy confianza a diestro y siniestro y sé que está mal, pero eso sale de mí así. Odio muchas cosas de mí pero espero que alguien venga y ame todo eso.

domingo, 6 de enero de 2013

Un momento.

Déjame un momento y te diré mil razones para que te quedes. Aquellas tardes que pasamos, tú y yo, juntos, siendo mío y de nadie más, sin ayuda de nadie para perdernos entre caricias, besos y susurros. Esas madrugadas, hablando de nuestro planes de futuro, riéndonos de nosotros mismos, picándonos mientras suelto alguna que otra lagrimilla y ella se encarga de recorrer todo el camino que hacen tus manos por la misma. Mañanas que hacen que empecemos el día con nuestros buenos días. Pero te digo que... Entre los distintos momentos del día quedan ratos para pasarlos juntos. Te quiero, y no un momento, sino todos los días.